Romería en La Algaba

Romería de la Purísima Concepción (o Romería de La Algaba): el primer domingo de junio se celebra la romería en honor a la Purísima Concepción de María Coronada. La Purísima de La Algaba recorre su camino desde la Iglesia de Santa María de las Nieves hasta su ermita de El Aral acompañada de romeros, romeras, caballistas y carretas.

Feria de La Algaba

Feria de La Algaba: más conocida por la Fiesta de los Toros, se celebra a mediados del més de septiembre. Es característica y conocida en el mundo entero por su plaza de toros (mitad de carros, mitad acementada en tendidos). Más de 30 años llevan celebrándose ños Ciclos de Promoción de Jóvenes Valores que son famosos en el mundo del toro y grandes figuras del mundo taurino, como Eduardo Dávila Miura, Fernando Cepeda, Manuel Jesús "El Cid" o José Tomás, han iniciado sus carreras en el ruedo algabeño. Tras finalizar las corridas, los jóvenes algabeños saltan al ruedo para participar en las capeas. Sábado y domingo de feria por la mañana tienen lugar los encierros en el barrio de Santa Marta donde los jóvenes corren delante de los toros. Por la noche en el Real la alegría de la Feria se extiende por el albero, casetas y farolillos adornan y divierten las noches de feria de La Algaba. Es una feria que acoge a muchos visitantes de otras localidades e incluso de la capital, dada la cercanía del municipio a Sevilla.

Candevelares en La Algaba

Candevelares: es una tradición exclusiva de esta localidad algabeña llevada a cabo el día 7 de diciembre al atardecer. Viene de Cande-velá. Según la historia oral de los mayores del pueblo, significa velar, esperar alrededor de una candela, pero...¿qué esperar?. La buena nueva que se esperaba eran noticias del dogma de la Inmaculada, se realizaba una candela y se esperaba durante toda la noche noticias del dogma de la Inmaculada. El origen de estas candelas se remonta a varios siglos. Durante varias semanas, niños y no tan niños se reparten en varios grupos para recoger maderas y leñas y realizar el candevelá más grande. En cada barrio y barriada del pueblo se montan estas grandes candelas rematadas por un júa (muñeco hecho de trapo y virutas de maderas para arder). Alrededor de estas candelas se cantan villancicos y se toman dulces típicos navideños.

Semana Santa en La Algaba

Semana Santa: La Algaba es un municipio rico en cultura cofrade. Las hermandades que procesionan por las calles del municipio durante la Semana Santa son: Hermandad del Cautivo el miércoles, Hermandad de la Vera Cruz el Jueves santo, Hermandad de Jesús Nazareno en la madrugá del Viernes santo, Hermandad de la Soledad el Viernes Santo y el Resucitado (de la Hermandad de la Soledad) el Domingo de Resurrección. También existen otras tantas agrupaciones religiosas como Santa Marta y El Hábeas Christi entre otras.

EL CARNAVAL

En Carnaval, en determinados puntos del pueblo, se instalaban bambas donde acudían las jóvenes a mecerse. Mientras eran mecidas por los mozos algabeños se entonaban coplillas, las bamberas, coplas de profunda raiz algabeña y acusada tradicionalidad.

Tampoco podían faltar en Carnaval las piñatas que, junto con las bambas, se constituían en símbolos de esta fiesta que hoy vuelve a resurgir de sus cenizas.

Nuestros mayores aun recuerdan esos lugares donde se instalaban las bambas más frecuentadas ; así, ellos nos hablan de la bamba de la Plazoteta de Gloria, la de la puerta de “la Lola”, la del antiguo cuartel, etc.

Si bien no podemos olvidar las bambas y las piñatas de Carnaval, tampoco podemos dejar de citar a los “murgistas” y sus “murgas”, coplillas sarcásticas, llenas de humor y picardía donde se aludía a personas del pueblo o se recurría a temas propios de Carnaval, tales como el sexo, el elogio al pueblo, a alguna familia pudiente y benefactora de la localidad, la política, etc.

En este trabajo de investigación hemos recogido una pequeña muestra tanto de murgas como de bamberas que esperamos ejemplifiquen al menos ese Carnaval de antaño, inserto ya en nuestra más profunda tradición.

 

NUESTRA PATRONA SANTA MARTA

Una tradición importante es conocer cómo fue elevada Santa Marta a Patrona de este pueblo. Existe un relato hecho por un cura párroco que hubo en el pueblo a finales del siglo XVIII y que dice así :

En el año 1600 hubo en el pueblo un azote de peste en el que morían todos los días hasta 18 y 23 personas.

Todo el mundo pedía clemencia al cielo para que desapareciese este mal, pero éste se agravó más. Así que D. Bartolomé Martín, cura por aquellas fechas, convocó al pueblo para que sacasen un patrono que fuese su especial abogado para que les libertase de semejante mal. Juntos en el templo, después de varios prometimientos que hicieron, mandó sacar una cántara donde tenían unas papeletas con ,los nombres de los santos del almanaque y al primero que sacaran sería su patrón. Para ello eligieron a un niño de corta edad sacando dos, la primera San Laureano y la otra Santa Marta y, habiendo diferencia sobre cual de los dos, se repitió y volvió a salir Santa Marta.

Y desde el instante en que salió por Patrona cesó el contagio y ningún otro murió, sólo el referido cura que al tercer día de dicha elección fue únicamente el que se contagió y murió, quedando el pueblo libre de esta epidemia.

Así tenemos a nuestros dos patrones, San Bartolomé y Santa Marta.

LA VERBENA DE SAN JUAN

Era una fiesta de características parecidas a la anterior en cuanto a su organización se refiere. Lo que ocurre ahora es que eran los vecinos de otra calle los encargados de organizarla. Esta fiesta se organizaba en el “compás” que actualmente es una de las calles más céntricas del pueblo y que hoy posee otro nombre. Se aprovechaba este lugar porque en él hay enclavada actualmente una pequeña estatua de la Virgen del Rocío con su fuente y jardines incluídos.

En este lugar se montaba un “tablao” donde actuaban unas animadoras que constituían un gran espectáculo, sobre todo cuando se subían un poco la falda y enseñaban las piernas, cosa poco usual en aquellos años de censura.

Se hacían actividades como carreras deportivas, todo tipo de concursos, etc. y, por supuesto, el fin de fiesta se cerraba con “toros de fuego”.

La organización era similar a la anterior pero en esta fiesta existía la particularidad de que cuando la gente daba su donativo se le solía poner un moñito.

Para escuchar a las animadoras y presenciar los actos organizados la gente traía las sillas de su casa ya que no se alquilaban comno se hace ahora.

En esta festividad, las chiquillas iban al sombrajo de la era a celebrar la fiesta con

brevas y chocolate ; le llamaban la “brevá” ; cada una se llevaba su tacita de casa.

LA VERBENA DE SAN ANTONIO

Esta fiesta se hacía en la calle de San Antonio ya que en ella hay una pequeña estatua del santo rodeada de una fuente y de jardines.

Esta fiesta la organizaban los vecinos de la calle pero en realidad todo el pueblo se volcaba colaborando económicamente. Los vecinos de la calle iban pidiendo por el pueblo y el dinero recogido servía para sufragar los gastos de la fiesta (la orquesta, los artistas, etc.). También se montaban chiringuitos y casetas donde la gente se divertía mucho pasándolo bien. Para los menores también había sus pequeñas atracciones.

La fiesta solía durar cuatro días procurando siempre que uno de ellos fuese el 13 de junio, festividad de San Antonio. El fin de fiesta siempre se cerraba con el tradicional “toro de fuego”.

CUANDO EL PUENTE SE CAYÓ (Puente Rodriguez de la Borbolla)

En la tarde del sábado, 29 de marzo, del año 1924, La Algaba se estremeció con una catástrofe que tuvo como protagonista a uno de los símbolos de nuestra localidad, el puente de Borbolla, aunque nosotros, los algabeños, lo conocemos popularmente como el “Puente de Hierro”.

Al parecer una grieta se había abierto en uno de los arcos del puente por lo que se había prohibido el paso de automóviles así como que se extremaran las precauciones; sin embargo, parece ser que llegó un coche procedente de Sevilla y pasó ; Los algabeños allí presentes que observaban la crecida del río comenzaron a pasar por la grieta y , cuando menos lo esperaban, los arcos se hundieron arrastrando con ellos a las personas que en esos momentos cruzaban el puente.

Quince personas murieron en la catástrofe, cinco hombres, tres mujeres y siete niños.

Como consecuencia del hundimiento La Algaba quedó totalmente incomunicada con Sevilla y las aguas, en su natural crecida, irrumpieron inundando el pueblo ; las aguas de la ribera de Huelva y la del Guadalquivir inundaron desde el kilómetro seis de la carretera de Santiponce cubriendo los puentecillos de Aznalcóllar e invadiendo toda la campiña.

Hoy en día nos queda el viejo puente como testigo mudo de uno de los episodios de la historia negra de nuestro pueblo.

Iglesia de Santa Maria de las Nieves

La Iglesia de Santa María de las Nieves se encuentra en la localidad de La Algaba en la provincia de Sevilla (España).

Historia

La Iglesia de Santa María de las Nieves se comenzó a construir en el siglo XIV pero tuvo que ser reedificada tras el terremoto de Lisboa en 1755 que produjo el hundimiento de sus naves, época también en las que se edificaron las capillas laterales de la nave de la Epístola, el coro y el cuerpo de campanas de la torre.

Descripción

Se trata de una iglesia mudéjar con planta de cruz latina y tres naves sostenidas por pilares con presbiterio de bóveda nervada. Tiene coro en alto a los pies además de las capillas de la nave de la Epístola antes mencionadas.
El retablo mayor es barroco, de tres calles, ejecutado entre 1725 y 1734 por Francisco de Acosta y Bartolomé García de Santiago, siendo el maestro dorador Francisco López, vecino de la villa de La Algaba. La principal imagen es la Virgen de las Nieves que preside el altar mayor. Obra del siglo XVI muy delicada. La acompañan en el retablo las imágenes de San Bartolomé, que tuvo tanta devoción por estas tierras, hoy casi olvidado; San Pedro, San Fernando, San Juan Bautista y San Sebastián.
La iglesia en general alberga tallas de escaso mérito, exceptuando la del Cristo de la Estrella, procedente del convento que poseyeron los padres franciscanos en esta villa, un Ecce Hommo en busto del siglo XVII y la de Santa Marta, patrona de La Algaba, tallada hacia 1590. Interesante también es el órgano, cuya caja fue realizada en 1779 por Francisco de Acosta.
Su orfebrería es bastante rica y numerosa, siendo algunos elementos labrados por Francisco de Alfaro.

Torre de los Guzmanes de La Algaba

La Torre de los Guzmanes se encuentra en la localidad de La Algaba en la provincia de Sevilla (España).

Historia

Esta torre mudéjar fue edificada bajo el señorío de los Guzmanes en plena guerra civil protagonizada por los señores de Medina Sidonia y Arcos en Sevilla. Se inició hasta 1440, cuando don Juan de Guzmán se hizo con la villa de La Algaba para cumplir funciones defensivas y residenciales y se finalizó pocos años después, hacia 1446, como indica la losa de mármol ubicada sobre la puerta de entrada en la que aparece el escudo que dice:

"Esta torre mando sas/er de usman f/señor defte lugar gijo de/l feños don lus gus/man maestre q fue de ca/latrava año de UVV/CC e XLVI años".

Descripción

Se trata de un fuerte baluarte almenado. Tiene 27 metros de altura y está construida en ladrillo, salvo la puerta de entrada y algunas ventanas que están hechas en piedra. Tiene cuatro plantas abovedadas y patio en la superior rodeado de un adarve. Su estado de conservación es aceptable.